Redacción deportes, (EFE).- El técnico alemán Thomas Tuchel sigue con atención la evolución y el estado físico del portero costarricense Keylor Navas, que en las últimas horas lucha contra el reloj y apura su puesta a punto para llegar a tiempo a la cita más importante en la historia del París Saint Germain, la final de la Liga de Campeones contra el Bayern Múnich en Lisboa.
El meta tico, de 33 años, está inmerso en una apurada cuenta atrás. Keylor desafía a los plazos. Dañado en el tendón de la corva de la pierna derecha tras un despeje de balón en el transcurso del partido que el campeón francés jugó contra el Atalanta el miércoles 13 de agosto, en los cuartos de final, apresura en su recuperación para llegar a la final del domingo.
El internacional costarricense pretende superar en solo diez días su dolencia en el bíceps femoral, diagnosticada por las pruebas a las que se sometió hace una semana. Una lesión que, habitualmente, requiere de, al menos, veintiún días de baja.
Keylor Navas saltó ya el viernes, cuarenta y ocho horas antes de la final, al campo de entrenamiento para ejercitarse con sus compañeros a las órdenes de Tuchel.
Es una cita que no se quiere perder el costarricense, en puertas de entrar en el olimpo de los elegidos. Keylor Navas, que se retiró en el minuto 79 del encuentro ante el Atalanta, de los cuartos de final, aún suspira por ocupar la meta del París Saint Germain que en semifinales tuvo que proteger el español Sergio Rico en el duelo contra el Leipzig.
El meta tico quiere jugar su cuarta final de la Liga de Campeones. Acumula tres títulos de la máxima competición continental el guardameta de San Isidro, clave con el Real Madrid en sus tres últimas conquistas europeas. Ante el Atlético Madrid en Milán, por penaltis, contra el Juventus en Cardiff y frente el Liverpool en Kiev.
Sabe Keylor Navas que está a un paso de convertirse en el primer portero en conseguir cuatro Ligas de Campeones. Ahora, con tres, está a la altura de jugadores como los españoles Iker Casillas, Víctor Valdés y Juan Alonso, el inglés Ray Clemence, el alemán Sepp Maier o el holandés Heinz Stuy, que lograron tres.
En su primer año en el París Saint Germain, al que llegó después de cinco en el Real Madrid, está a punto de conseguir un pleno de títulos después de la Ligue 1, la Copa de Francia y la Copa de la Liga de Francia.