El Barcelona perdió 1-2 contra el Osasuna, que no se jugaba nada en su visita al Camp Nou, en otro partido muy flojo del conjunto de Quique Setién en la noche que el Real Madrid ha confirmado su título de Liga.
El Osasuna, sólido atrás y ágil en el contraataque, se encontró cómodo durante el primer tiempo gracias al gol conseguido por José Arnáiz con un disparo desde el interior del área en el minuto 16. Hasta el descanso el Barcelona fue incapaz de reaccionar y tan solo se acercó con peligro a la portería de Sergio Herrera mediante lanzamientos de tiro libre de Lionel Messi.
Riqui Puig consiguió dar algo de dinamismo al ataque local, pero la defensa de cinco planteada por Jagoba Arrasate se encargó de desbaratar una y otra vez los intentos del Barcelona, lento en la construcción del juego y frágil en la fase defensiva.
Precisamente fue el joven jugador azulgrana quien originó el gol anulado a Braithwaite por fuera de juego al inicio del segundo tiempo, en el cual el Barcelona mejoró tímidamente en algunos tramos. En el 62, Messi igualó el encuentro con un gran lanzamiento de tiro libre, en su cuarto intento de la noche.
Luis Suárez hubiese podido dar la vuelta al marcador seis minutos después pero su remate de volea que acabó en la red también fue invalidado por fuera de juego.
La expulsión de Enric Gallego en el 75, cuando tan solo llevaba cuatro minutos en el terreno de juego, parecía que allanaba el camino del triunfo para el Barcelona, pero finalmente fue Roberto Torres quien en el 94 dio los 3 puntos a los visitantes al culminar con efectividad un contraataque. EFE