El Covid-19 cambió nuestras vidas, desde la forma en que ahora trabajamos hasta cómo nos relacionamos con los demás. Debido a la actual pandemia, las personas con discapacidad han tenido problemas para adaptarse al uso obligatorio de mascarillas.
En Guatemala, se estima que más de 240 mil personas viven con discapacidad auditiva (según la Encuesta Nacional de Discapacidad 2016) y más del 95% utiliza la lectura labial para comprender a quienes le rodean. La organización Círculo, que trabaja con personas con discapacidad, fabricó cubrebocas inclusivas para quienes viven o se relacionan con individuos sordos. La mascarilla posee la protección adecuada contra el coronavirus y permite ver las expresiones bucales-faciales de quien la use. Tras siete semanas de trabajo, Círculo encontró los materiales adecuados para mantener visible las láminas que cubren las aberturas de las mascarillas y así proteger la salud de quienes las usen.
El Comité Prociegos y Sordos de Guatemala está implementando dicha mascarilla con sus capacitadores en cursos de lenguaje de señas, además, la está distribuyendo al público en sus instalaciones.
