Las Vegas, EFE.- La boxeadora estadounidense Mikaela Mayer salió de la
cartelera boxística del martes en Las Vegas debido a que dio positivo por coronavirus.
La promoción de la empresa de Bob Arum, la Top Rank, había contemplado a Mayer,
de 29 años, para la velada pugilística en un combate en el que se enfrentaría a
la también estadounidense Helen Joseph.
Pero este domingo Mayer anunció en Instagram el resultado positivo de su prueba
al coronavirus.
“Fue una sorpresa completa. Actualmente estoy asintomática y estoy en
cuarentena en una ubicación fuera del sitio, según las pautas recomendadas”,
dijo.
“El resto de mi equipo dio negativo y todos están en buen estado de salud”,
agregó.
Mayer indicó que tenía muchas ganas “de traer de vuelta el boxeo para todos
ustedes y estoy decepcionada por mí, por mi equipo, mis seguidores y por mi
oponente, Helen Joseph, que trabajó tan duro para estar aquí esta semana y
hacer un espectáculo para todo el mundo”.
Más tarde dijo que había una posibilidad de que el resultado de la prueba
pudiera ser un falso positivo, pero los protocolos de la Top Rank para la pelea
del martes no permiten volver a realizar la prueba.
Si surge una prueba positiva en algún momento durante el proceso de
verificación previa, la peleadora se retira inmediatamente de la tarjeta y se
pone en cuarentena fuera de la burbuja del MGM.
Evan Korn, portavoz de Top Rank, dijo que no ha habido otras pruebas positivas
para boxeadores o integrantes de equipos para la cartelera del martes,
encabezada por Shakur Stevenson.
La invicta Mayer (12-0) había pasado la mayor parte de los últimos 2 meses en
Washington, D.C. y Houston en un campamento de entrenamiento después de
conducir con sus 2 perros y su mejor amiga, Ginny Fuchs, desde su hogar en
Colorado.
Mientras estaba en Houston, el gimnasio donde Mayer estaba entrenando, el Main
Street Boxing, había reabierto al público.
Antes de conocer los resultados de las pruebas, Mayer había dicho que estaba
preocupada una vez que el gimnasio abrió, no necesariamente para ella sino para
sus entrenadores, Kay Koroma y Al Mitchell.
“Muy raro y un poco estresante porque de repente el gimnasio está lleno de gente,
y yo digo, ‘¿Qué tan seguros están estos jóvenes antes de que entren en este
gimnasio?’”, dijo Mayer el mes pasado.
“Aunque no estuve en cuarentena en casa como mucha gente, encerrada en su casa,
estaba en el camino haciendo cosas, fui muy cautelosa”, comentó.