Gisela Morales se reinventa y ofrece clases de natación en línea, debido
a la pandemia.
Aun en tiempos difíciles, como los que se viven en la actualidad alrededor del mundo, lo imposible no existe en la mente de la exatleta Gisela Morales, quien creó contenido para clases de natación en línea, con lo que su academia Waterproof Swim se ha reinventado para seguir activa.
Regularmente podríamos creer que para aprender, practicar o reforzarnos en la natación es indispensable tener una piscina; sin embargo, Morales, con sus bastos años de experiencia, demuestra que no, y que sin incluso sin agua es posible practicar dicha disciplina.
“La natación es más que natación, y con nuestro servicio de clases en línea estamos aprovechando para abarcar los complementos a los que normalmente no se les presta mucha atención, pero que son, incluso, más importantes que solo meterse al agua”, refirió la exnadadora de alto rendimiento.
Según la Sirenita, hay movimientos básicos que se practican y aprenden mejor fuera del agua, como la flecha, la correcta ejecución de la patada, el agarre, el posicionamiento de la cabeza o la misma mecánica de los estilos, entre otros.
“La base se aprende mejor fuera de la piscina, para que los alumnos no estén pensando en que el agua se les va a entrar en la nariz, que se van a ahogar, a hundir o que tienen que patalear”, manifestó la 2 veces olímpica, en Atenas 2004 y Pekín 2008.
Según explicó una de las máximas exponentes que Guatemala ha tenido en la natación, aprender lo esencial adentro del agua podría presentar una mayor dificultad, puesto que se debe tener la capacidad de “poder coordinar los pies con los brazos, con la cabeza, con el cuerpo, con el estómago, etcétera”, porque dicho deporte requiere del 100 por ciento de coordinación.
“De manera que cuando los alumnos puedan regresar a clases, o si tienen piscina en casa, sepan exactamente la memoria muscular y ejecutar los ejercicios con la técnica correcta”, amplió la también franquiciada del Gimnasio F45.
Aunque los tiempos han sido difíciles para Morales, también le han permitido explorar más facetas como profesional, pues es la encargada de crear el contenido, difundirlo a sus alumnos y resolver dudas al respecto.
“Ha sido una etapa difícil, porque soy yo quien tiene que hacerlo todo; pero creo que ha sido un proceso bonito, porque a veces muchos clientes me pedían que fuera yo quien les diera clases a sus hijos, o a ellos mismos, y eso se dificultaba, porque tengo tres academias y múltiples horarios de clases, pero con esta situación encontramos la forma”, expuso.
Respecto de la respuesta de sus alumnos, la destacada guatemalteca comenta que ha sido positiva, porque quienes están en el programa tienen claro que la natación es lo que les gusta, y muchos de ellos, además, se visualizan en un futuro competitivo.
Y aunque sus ingresos bajaron, Gisela asegura que se mantiene positiva, pues de esa forma envía un buen karma, para que cuando este regrese, le traiga cosas positivas.
“Esto será un poquito como Rocky: el que más aguante los golpes, eventualmente podrá salir a flote”, concluyó Morales.
En su gimnasio, el F45, también se adaptaron a impartir las clases en línea, mientras la situación sanitaria del país permite reabrir los centros de ejercitación física.