Las plazas comerciales son objeto de supervisiones por parte de autoridades municipales, con el objetivo de evitar aglomeraciones durante la emergencia del coronavirus.
Esta labor se realiza de manera conjunta con las policías municipales, Policía Nacional Civil y Procuraduría de los Derechos Humanos, para verificar que negocios como farmacias, restaurantes, supermercados y otros comercios cumplen con los protocolos sanitarios.
El 3 de mayo, el Gobierno autorizó el reinicio de labores de plazas comerciales y tiendas de conveniencia, siempre y cuando se respete el distanciamiento social, utilicen mascarillas de protección y alcohol en gel.
Ante ello, personal edil efectúa recorridos para constatar que se acaten las normas. En el caso de los restaurantes, solo está permitida la compra de comida para llevar, mientras que en los supermercados se permite el ingreso de los clientes por grupos.
Agentes de Tránsito y de la Policía Nacional Civil vigilan que no se expenda licor después de las 17:00, y que a partir de las 18:00 la ciudadanía se haya resguardado por el toque de queda. • Sara Solórzano