A pesar de ser uno de los héroes más inteligentes del Universo Marvel y uno de los integrantes fundadores de los Avengers, Hank Pym tiene muy mala fama y los fans no se lo perdonan.
El profesor Henry Pym ha tenido muchos logros. Es un inventor prolífico y es el descubridor de las partículas subatómicas que llevan su nombre y que le dan la capacidad a cualquier persona de controlar su tamaño, pudiendo hacerse diminuto o gigantesco en un parpadeo. Pym utilizó sus conocimientos para convertirse en una serie de héroes como Yellowjacket, Giant-Man y Goliath, pero es más conocido por ser el Ant-Man original. Sin embargo, una historia en particular lo pintó en muy mala luz, y no ha podido recuperarse del todo.
La cosa fue así: en Avengers #213 (1981) Pym fue reprendido por Captain America por atacar a una oponente a traición, a pesar de que esta ya no estaba luchando. Los Avengers decidieron llevar su caso a revisión, pero Pym estaba convencido de que iba a perder su lugar en el equipo, por lo que creó un robot al que llamó Salvation-1. El robot era casi invencible, pero tenía un talón de Aquiles que solamente Pym conocía. La idea era soltar al robot contra los Avengers para luego “vencerlo”, y así recuperar su lugar en el equipo.
Sin embargo, su esposa Janet se enteró del plan, y al querer convencerlo de que no lo llevara a cabo, Hank reaccionó propinando un bofetón tan violento a Janet que la tiró al suelo. Hank soltó a Salvation y el robot se salió de control y estuvo a punto de aniquilar a los Avengers, pero Janet logró desactivarlo a tiempo. Luego de que los otros héroes supieron todo, echaron a Pym sin mayores miramientos, y Janet le pidió el divorcio. Con el paso de los años Pym ha logrado enderezar el rumbo lentamente, pero el público no ha olvidado el uso de violencia contra Janet.
Entre quienes se niegan a ver a Hank Pym como un golpeador de mujeres está Jim Shooter, el escritor de la historia que mencionamos anteriormente. Y es que originalmente Pym no iba a abofetear a su mujer intencionalmente, sino que accidentalmente, al hacer un gesto con los brazos sin ver que Janet estaba muy cerca.
El problema estuvo en que el artista Bob Hall, quien era un novato, no sabía cómo resolver la escena mostrando el golpe como algo fortuito, y, después de varios intentos fallidos, decidió plasmarlo como algo intencional. Otra cosa es que Hall también trabajaba muy lento, y para cuando Shooter se dio cuenta de cómo había planteado el recuadro, ya era muy tarde para corregirlo, así que decidieron acuerpar el error e incorporarlo a la narrativa, condenando así a Hank Pym para siempre.