Como una muestra de apoyo y agradecimiento por parte de la sociedad y diferentes entidades internacionales, cada 4 de mayo se celebra el Día Internacional del Bombero Forestal, responsable de controlar y liquidar los incendios en zonas boscosas y pastizales en todo el mundo.
“Reconocemos y homenajeamos a los bomberos y combatientes forestales, así como a las personas voluntarias, Héroes y Heroínas al Límite, quienes arriesgan su vida durante la incansable misión de proteger los bosques, hogar de miles de especies de flora y fauna, de las llamas”, expresó Rony Granados, gerente del Instituto Nacional de Bosques (Inab).
De acuerdo con esta institución, la actual temporada de incendios forestales (2019-2020) ha sido atípica, se han reportado más de 1,188 siniestros que han consumido 2,850 hectáreas de bosque.
De estos han estado activos hasta 35 a la vez, que son muchos en comparación con la temporada anterior cuando se reportaron 900 incendios hasta abril 2019.
Las llamas en el bosque son un problema latente en el país que afecta cada año a los diferentes ecosistemas, lo cual provoca daños ambientales, económicos, de salud, a la flora, a la fauna y a los paisajes.
El uso irresponsable del fuego y el comportamiento variado de las condiciones climáticas son causas que provocan estas catástrofes, señala la entidad mediante un comunicado.
Antecedentes
La conmemoración del Día Internacional del Combatiente Forestal surgió en diciembre del año 1998 a raíz de un accidente ocurrido en el incendio “Linton” en Canadá, donde perdieron la vida cinco combatientes de una brigada.
En este día se manifiesta el apoyo de entidades nacionales e internacionales y de la sociedad a quienes combaten los incendios en el bosque, reconociendo su nivel de compromiso y dedicación.
Recuerdan a quienes han perdido la vida, sufrido daños o secuelas en la lucha contra los incendios forestales. Además, se da a conocer el respeto y agradecimiento hacia quienes tratan de preservar la vida y la integridad de los patrimonios y recursos naturales.