La Universidad Rafael Landívar (URL) se encuentra desierta. Las clases se reciben en línea, para acatar las órdenes gubernamentales de permanecer en casa y así evitar la propagación del Covid-19 en el país. Pero el Centro de Investigación, Capacitación y Diseño en Tecnologías Alternativas (CTA) continúa funcionando, con sus 12 impresoras 3D.
Ovidio Morales, Rodrigo Mayén y Ervin Moreno trabajan toda la mañana desde hace semanas, para completar un lote de 700 protectores faciales que serán donados al Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, para distribuirlos entre el personal médico que se encarga de enfrentar la pandemia.
El diseño de los protectores se realizó en la URL, y ha tenido modificaciones para hacer más rápida su impresión y aprovechar mejor el material. Cada marco de los protectores tarda un aproximado de 30 minutos en imprimirse.
