Estos días nos han enseñado que todo puede cambiar de un momento a otro. Hace unas semanas publiqué en un tuit: “Esta temporada vino a recordarnos por qué es tan importante besar cuando uno ama y abrazar cuando se nos da la gana”. Me voy a poner en plan “la mamá del grupo”, pero, ¡ya vieron! El amor debe expresarse siempre, a toda costa. Quítense de la cabeza el miedo a la intensidad, pues de un día a otro podríamos no volver a ver a los seres que amamos.
Dicho esto, la columna de la semana está dedicada a todos los que han mantenido la llama prendida a distancia.
La pregunta que hice fue “¿Qué están haciendo con la relación a distancia por el COVID-19?” Aquí algunas ideas:
“Netflix party”.
Amigos, no puedo ni contar a todas las personas que me recomendaron Netflix party. Si les gusta ver películas en pareja, se los recomiendo sumamente. Mi mejor amigo ve películas con su novia así, a diario.
“Yo le mando detallitos por Glovo a mi novio”.
Querido novio de esta amiga: no la dejes ir por nada del mundo. ¡Qué belleza este detalle! Posdata: Lysol antes de mandarlo, Lysol al recibirlo.
“No tener una relación”.
Si no tienes una relación, no hay que mantenerla a distancia… muy inteligente de tu parte, amigo.
Luego pregunté: “¿Extrañan mucho a su pareja, qué es lo que más extrañan?
Todos extrañan mucho a sus parejas. Extrañan platicar, pasar el tiempo, los besos, los apapachos. Esto me llena de amor, amigos. Les dejaré algunas respuestas que me hicieron llorar.
“*Malapalabra* sí, lo extraño un montón. Pasar tiempo con él era desconectarme del mundo”.
Sin comentarios, amiga, qué belleza.
“Los abrazos, esos abrazos deletrean la palabra hogar”.
Qué lindurita. Es cierto, yo podría vivir en los abrazos de S.
…Conclusión
Queridos, todos, es una esperanza para el mundo que el amor se mantenga vivo siempre, a pesar de todo. Aunque no me fascinan las enseñanzas de las películas de princesas, quiero decirles que hay una con la que me quedo, la del “beso de amor verdadero”, porque el amor puede salvar el mundo.
Por Eugenia Cruz