Se reportan más de 8 mil fallecimientos en todo el mundo.
El número de casos globales de coronavirus causante del COVID-19 ha superado la barrera de los 200 mil afectados, mientras que los fallecidos superan los 8 mil, informó ayer en rueda de prensa el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyersus. El 80 por ciento de los casos en la pandemia están concentrados en Europa y el Pacífico Occidental, detalló Tedros.
“Muchos países están afrontando una escalada de la epidemia, se sienten superados, y sabemos las tremendas dificultades que viven y las difíciles medidas que están teniendo que tomar”, aseguró el máximo responsable de la OMS.
Más esfuerzos
El doctor etiope reiteró que nadie debe “asumir que su comunidad o él mismo no se verán afectados”, y sugirió que todos aumenten sus esfuerzos para frenar el avance del coronavirus y conseguir que la pandemia “sea manejable”.
Tedros subrayó que la OMS continúa recomendando el aislamiento, la conducción de test y el tratamiento de los afectados como principales estrategias para combatir el COVID-19.
“El virus es una amenaza sin precedentes, pero también una oportunidad para unirnos contra un enemigo de la comunidad”, afirmó.
Por otro lado, la OMS criticó el uso de expresiones como “virus chino” para referirse a la actual pandemia del COVID-19, utilizada con frecuencia por políticos como el presidente estadounidense Donald Trump. “Hemos dejado claro desde el principio que este virus no tiene fronteras, no tiene en cuenta el color de nuestra piel o cuánto dinero tenemos en el banco, y es importante ser cuidadosos con el lenguaje”, señaló en rueda de prensa el director ejecutivo de la OMS para Emergencias Sanitarias, Mike Ryan. Preguntado por un medio de Hong Kong sobre el uso casi a diario de la expresión “virus chino” por parte del presidente estadounidense, Ryan aseguró que “debe evitarse relacionar un virus con una etnia, porque lo que se necesita es solidaridad y trabajar juntos”.
“La pandemia de gripe de 2009 se originó en Norteamérica, y no por ello la llamamos ‘gripe norteamericana”, concluyó el médico irlandés.