Con el objetivo de brindar atención integral a los guatemaltecos que sufren de problemas renales en el país, el presidente Alejandro Giammattei se reunió ayer con integrantes de la Comisión Técnica Asesora del Registro Guatemalteco de Diálisis y Trasplante Renal, de la cual forman parte el Ministerio de Salud Pública y el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS).
Durante la cita, el mandatario propuso crear una unidad nacional de atención a pacientes renales donde las personas “sean atendidas bajo un solo protocolo de tratamiento y que el tema se pueda abordar de manera integral por el Gobierno y el Seguro Social”.
Agregó que la solución para los pacientes con problemas renales radica en la creación de una unidad de trasplantes renales y dejar de lado los tratamientos de hemodiálisis, que únicamente son un paliativo para el problema. “Quisiéramos apostar no una unidad, sino un pabellón de trasplantes donde pudiéramos atender a la gente”.
Explicó que esto podría ser una realidad si el Gobierno, el IGSS y la cooperación internacional unen esfuerzos.
En ese sentido ofreció el espacio físico para la creación de la unidad, que podría ser ubicada en una aplicación del Hospital San Juan de Dios o en el Hospital Roosevelt. “Tenemos la capacidad, tenemos a los médicos y existe la voluntad. Debemos aterrizar las ideas en una sola estrategia, para que tengamos una sola unidad que atienda a los pacientes del IGSS y a quienes no sean afiliados”, precisó.
Subrayó que, para hacer realidad el proyecto, debe contarse con apoyo financiero de ambas partes. “Que se le caiga el codo al IGSS y aporte Q15 millones, nosotros ponemos los otros Q15 millones y arrancamos este año.
Quiero contribuir a que este proyecto sea una realidad”, manifestó el gobernante. La construcción de la unidad podría tardar entre 8 y 10 meses, y se buscará el apoyo para el equipamiento, se informó. • Luis Carrillo