Un golazo del argentino Paulo Dybala certificó ayer el triunfo por 2-0 de la Juventus contra el Inter, en un partido disputado a puerta cerrada por el coronavirus, y permitió al equipo turinés superar a la Lazio y hacerse con el liderato en solitario en la Serie A italiana.
Los hombres del técnico Maurizio Sarri decidieron el clásico de Italia en la segunda mitad gracias a los goles del galés Aaron Ramsey y de Dybala, quien fue protagonista con un auténtico golazo con el exterior de la pierna izquierda. En el silencio de un Allianz Stadium desierto, el Inter y la Juventus se anularon durante los primeros 45 minutos, con el cuadro turinés que salió mejor y el milanés que creció con el paso del tiempo. El holandés Matthijs De Ligt y el francés Blaise Matuidi se toparon con un atento meta esloveno Samir Handanovic, mientras que el croata Marcelo Brozovic asustó al guardameta polaco Wojciech Szczesny.
Iba tomando coraje el Inter, que llegaba a esta cita con 6 puntos menos que la Juventus, y 1 partido menos, pero fueron los de Turín los que golpearon primero. Fue en el minuto 55 cuando un centro de Matuidi fue rematado en el área pequeña por Ramsey.
Y la Joya Dybala tuvo un efecto demoledor en el choque. En el minuto 67 abrió y cerró una acción espectacular. Regateó en el área al inglés Ashley Young y fulminó al portero con la izquierda. Roma, EFE