La Lazio remontó y ganó 2-1 ayer, en el estadio Olímpico romano contra el Inter de Milán y, con su decimonoveno partido sin conocer la derrota en la Serie A italiana, superó al cuadro interista en la clasificación y se colocó a un punto de distancia del líder Juventus, lo que alimenta su sueño de conquistar el scudetto.
Un gol del inglés Ashley Young dio ventaja al Inter al descanso, pero un penalti marcado por Ciro Immobile, máximo artillero del torneo con 26 dianas, y un tanto del serbio Sergej Milinkovic-Savic remontaron para una Lazio que no se pone límites y que anunció batalla para destronar a la Juventus, 8 veces consecutivas campeón de Italia.
Antes del comienzo del encuentro el espectáculo estuvo en las gradas del Olímpico, con el fondo norte que exhibió un mosaico con dos banderas, una del Lazio y otra del Inter, para celebrar la “amistad” que los vincula “desde hace más de treinta años”, tal y como rezaba el escrito que la acompañaba.
En el campo, Lazio e Inter jugaron un partido de ajedrez, rico de táctica, en el que los dos equipos, ambos con línea defensiva de tres y centro del campo denso de hombres, cerraron espacios y blindaron sus áreas.