La apertura a los negocios ha impulsado las economías de América Latina y el Caribe.
América Latina y el Caribe experimentó una aceleración en su crecimiento económico y salarial, gracias a la reducción de sus barreras comerciales, según el informe De promesas a resultados en el comercio internacional: lo que la integración global puede hacer por América Latina y el Caribe, del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
El documento también incluye recomendaciones de políticas para asegurar que la región esté mejor posicionada para sacar provecho de la liberalización comercial y lograr que los beneficios sean más tangibles para sus ciudadanos.
En este sentido, el banco recomienda a los gobiernos realizar mayores esfuerzos para reforzar el apoyo al comercio internacional y garantizar que los beneficios tengan un mayor alcance.
La reducción arancelaria promedio del 56 por ciento que se registró en la región entre 1990 y 2010 aceleró el crecimiento del Producto Interno Bruto anual per cápita promedio en 0.6 puntos porcentuales, cita el reporte.
Si bien los resultados son positivos, la región alberga escepticismo sobre los beneficios de una mayor apertura, en parte porque las expectativas iniciales eran muy elevadas, dice el estudio.
“La liberalización comercial no resultó ser la fórmula milagrosa para fomentar el crecimiento de la región, como fue el caso de algunas economías asiáticas de alto desempeño”, dijo Eric Parrado, economista jefe del BID.
“Sin embargo, el comercio claramente ha contribuido de manera positiva al bienestar y desarrollo de la región, y deberíamos resistir la tentación de retornar a las políticas de economías cerradas de décadas anteriores”, aseguró.
El informe forma parte de la serie de publicaciones bandera Desarrollo en las Américas (DIA), que ofrecen análisis y recomendaciones a los funcionarios responsables de la formulación de políticas sobre asuntos clave de desarrollo.
El documento también analizó el nivel de apoyo al libre comercio, y mediante el resultado de una encuesta encomendada a Latinobarómetro se estableció que los latinoamericanos apoyan ampliamente la expansión del comercio, pero su apoyo cae abruptamente cuando se les presenta información enfatizando las consecuencias negativas que puede acarrear, como la pérdida de puestos de trabajo en sectores vulnerables.
Casi tres de cada cuatro encuestados expresaron que preferían aumentar el comercio internacional. Los países que mostraron el mayor apoyo fueron Venezuela, Honduras y Uruguay.
Casi seis de cada diez latinoamericanos ven el comercio como sinónimo de más empleo. No obstante, al brindarles información sobre las potenciales pérdidas laborales en sectores vulnerables, ese apoyo se redujo del 73 al 46 por ciento.