Como resultado del patrullaje impulsado por personal de la Dirección Regional Suroriente, del Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap), fueron recolectados 2 mil 273 huevos de tortuga marina de la especie parlama, informaron las autoridades.
Esta tarea se llevó a cabo en coordinación con agentes de la División de Protección de la Naturaleza (Diprona), de la Policía Nacional Civil (PNC).
Los huevos fueron entregados a los tortugarios respectivos, para ubicarlos en un área donde serán cuidados y puedan desarrollarse sin el riesgo de ser devorados.
Los patrullajes se ejecutan en las playas de comunidades de la zona marinocostera de Chiquimulilla, Santa Rosa, donde las aguas son utilizadas por las tortugas como corredores migratorios y área de alimentación.
Su estadía en dichas regiones tiene una importancia ecológica en distintos ecosistemas, como arrecifes, coralinos, pastos marinos y transporte de energía entre el mar y la playa.
Estas especies son consideradas indicadoras de la salud del mar, debido al tamaño de sus poblaciones, pero son amenazadas por la sobreexplotación del ser humano, para consumo de sus huevos, carne, piel, y su caparazón.