Maléfica es un monstruo. Un ser hecho para el mal. La
oscuridad en el cuento. O eso es lo que nos han contado. Maléfica es, en
realidad, un modelo de madre, un corazón enorme tapado por la oscuridad de unos
cuernos negros. Maléfica es Angelina Jolie, la cara B de un cuento que hace
muchos años dejó de ser de hadas.
La actriz estadounidense recibe a la agencia EFE en Londres y lo hace sin el lúgubre
vestido negro que luce en Maleficent:
Mistress of Evil, secuela del film original. Tampoco refleja su cara los
rasgos afilados con los que se caracteriza para el papel. Las alas negras
reposan a un lado. Su carácter se lanza a explicar el porqué de la existencia
de esta Maléfica.
“Espero que este mensaje ayude a entender mejor el lado
profundo de la gente. Que no se asuman cosas. Siempre estamos asumiendo cosas.
A veces, la gente que parece demasiado dura, demasiado malvada, está sufriendo
mucho y, en el fondo, no es tan mala”, explicó la actriz estadounidense.
Angelina, cinco años después, vuelve para interpretar a
Maléfica en esta reinvención del cuento clásico de Charles Perrault.
Si la primera parte fue una vuelta de tuerca de
lo que Perrault parió hace cuatro siglos, esta secuela, que se estrena mañana
en Guatemala, continúa la historia y expande el universo, dando pie a hablar de
muchos más temas que el relato original.
“Hacer cuentos de hadas hoy es algo que te da bastante
libertad, porque puedes hablar de muchas cosas de una manera que no sea
demasiado obvia. Puedes contar muchas historias de un modo más colorido. Hablar
de temas como la diversidad o el medioambiente de forma accesible”, replicó
Angelina.
Porque Maléfica ya no es una historia de príncipe salva a
princesa con un beso en su lecho de muerte. Disney ha dejado atrás ciertos
convencionalismos y, si en la primera todo el peso recaía en Maléfica y Aurora,
la otrora Bella Durmiente, esta vez el elenco se expande, con el protagonismo
puesto siempre en la mujer.
A la estrella que es Angelina se ha unido Michelle Pfeiffer,
en el papel de madre del príncipe que pide matrimonio a Aurora. En una historia
en la que siempre se ha creído que Maléfica era la cara malvada, Pfeiffer asume
el rol de antagonista y desata una guerra contra la naturaleza.
La inocencia la encarna Elle Fanning en el papel de Aurora,
mientras que el príncipe Philip lo interpreta Harris Dicksinson y Sam Riley
vuelve a ser Diaval, el inseparable compañero de Maléfica.
Angelina, sin embargo, rechaza el protagonismo de la mujer
por encima del hombre. “Queremos dejar patente que el
príncipe también es alguien fuerte”, reconoce cuando es preguntada por la eliminación
de príncipes azules. “Todos los hombres en la película son personas fuertes y
eso es algo importante. Queremos mujeres fuertes, pero también hombres fuertes”,
reflexionó.
La fortaleza de Angelina es su unión con su hija adoptiva en
la película, Aurora. Tras el drama familiar de la primera cinta, ambas vuelven
a demostrar que la familia no se forma por sangre. “Estos dos personajes, Maléfica y Aurora, han sido
enemigos durante mucho tiempo, y ahora los hemos convertido en madre e hija.
Hemos querido esperar cinco años para la secuela, para encontrar una historia
que quisiéramos contar, más relacionada con el mundo en el que vivimos ahora”,
señaló Fanning.
Para Fanning, esta es la primera secuela de su vida.
Prácticamente su carrera ha crecido en paralelo a Aurora. La primera llamada y
el primer estallido de júbilo al ser aceptada para el papel llegó cuando tenía
14 años y ahora con 21 se prepara para no defraudar a los fans.
“Recuerdo cuando recibí la llamada para la primera película, empecé
a gritar, me volví loca. Interpretar a una princesa Disney, a esa edad, era una
locura. Fue un momento especial de mi vida, un capítulo que me marcó, y ahora
volver… nunca he hecho una segunda parte, nunca he revisitado un personaje.
Es una responsabilidad con los fans y
conmigo misma porque es un personaje que llevo en el corazón”, remarcó.
Con su inminente estreno en cines, es tiempo de dejar volar
la imaginación con otros proyectos y tanto Angelina como Fanning coinciden en
que una de la historia más interesante para conocer la cara b es Cruela de Vil
en 101 dálmatas. “También estaría bien conocer el porqué de la bruja de
Blancanieves”, apuntó Fanning.
“Sería genial poder juntar a todas las villanas en un solo film”, agregó Angelina y es que, por ahora, solo Maléfica ha sido desenmascarada.
*Manuel Sánchez Gómez / EFE