Los pagos de incentivos forestales han sido acreditados puntualmente.
De 2016 a 2019, el Gobierno ha erogado Q1 mil 396.5 millones en incentivos forestales, como parte de los esfuerzos por conservar y cuidar de manera sostenible los recursos forestales del país, por medio del Instituto Nacional de Bosques (Inab).
En ese sentido, durante la gestión del presidente Jimmy Morales se incrementó la asignación del presupuesto a los Programas de Incentivos Forestales para Poseedores de Pequeñas Extensiones (Pinpep) y Probosque, alcanzando los Q418.8 millones por año. De acuerdo con el Inab, 24 mil 77 proyectos nuevos han sido incorporados en estos cuatro años, generando no menos de 17 millones de jornales en modalidades de protección, recuperación y manejo forestal.
También se ha trabajado en proyectos de mantenimiento en las fases de plantación forestal, sistema forestal, protección, producción y restauración de 681 mil hectáreas de manto boscoso.
Estas acciones han permitido beneficiar a 240 mil familias, la mitad de esta en los departamentos de Huehuetenango, San Marcos, Alta y Baja Verapaz y Petén. Las personas beneficiadas de manera directa o indirectamente ascienden a 1 millón 214 mil 219 durante este período, de las cuales el 35 por ciento son mujeres.
Los pagos por incentivos se han hecho de manera puntual, según el calendario elaborado con el Ministerio de Finanzas Públicas, lo cual ha fortalecido la credibilidad de ProBosque y Pinpep.
No menos del 50 por ciento de estas iniciativas se ejecutan en municipios catalogados como de alta vulnerabilidad nutricional, por lo cual los jornales contribuyen a la reducción de la desnutrición.
Cada programa tiene un fin específico: el Pinpep se trabaja con personas que poseen tierras menores a 15 hectáreas. ProBosque busca promover y fomentar el desarrollo forestal, mediante el manejo sostenible de los bosques, reducir la deforestación de las tierras de vocación forestal y motivar a la reforestación de áreas degradadas e incrementar su productividad.