La soprano habla acerca de su triunfo en Operalia y sus próximos proyectos.
La voz de Adriana González cautivó Operalia 2019, tanto que se coronó ganadora de este certamen de ópera celebrado en Praga, República Checa. De eso ha pasado exactamente un mes, pero con las emociones aún a flor de piel, la artista llega a ¿Qué están haciendo?, para recordar los mejores momentos del concurso y compartir sus nuevos proyectos, que incluyen la grabación de su primer disco.
¿Qué estabas haciendo antes de contestar este cuestionario?
Visito a mis padres en Antigua Guatemala y estudio para mi debut como La Contessa (Las Bodas de Fígaro), en Francia.
¿Qué sentiste al escuchar tu nombre como ganadora de Operalia 2019?
No lo podía creer. Estaba tan nerviosa que no sabía a quiénes les habían dado premio. Es un sueño hecho realidad, y es también una confirmación de que trabajo en la dirección correcta.
¿Cómo viviste el apoyo de los guatemaltecos con tu triunfo?
¡Ha sido enorme y muy inspirador! Fue abrumador cuántos mensajes me llegaron por redes sociales, email, WhatsApp y llamadas. Hoy, todavía trato de responder cada texto. Lo más gratificante y lo que me hace mantener los pies en la tierra es saber que las nuevas generaciones están descubriendo la ópera y que quieren seguir este camino. Estoy muy agradecida por el apoyo de guatemaltecos y latinoamericanos, porque son como una gran familia que está con uno.
Has formado tu carrera artística fuera de Guatemala. ¿Cuáles han sido los países clave para labrar tu camino en la ópera?
Creo que Francia ha tenido un gran impacto. Es mi lugar de residencia, fue mi hogar artístico en los años de mayor formación y desde allí se me abrieron las puertas de Europa. Además, allí conocí a los mentores que hasta hoy me ayudan a manejar mi carrera. Otros países importantes han sido Suiza y España, porque me han dado grandes oportunidades para presentarme en roles principales.
En junio recibiste la Medalla a artistas y personalidades de Latinoamérica residentes en Francia. ¿Qué significó para ti este galardón?
Fue una enorme satisfacción saber que mi país es considerado por la gente que hace música y arte. Pero sobre todo, siendo extranjera, que me den una medalla por interpretar música francesa, es un gran elogio. Son bastante exigentes con la pronunciación y estilo.
¿Tienes planes para regresar a Guatemala en un futuro cercano?
Sí, regreso en las primeras semanas de diciembre para cantar en El Mesías, de Händel, y para ofrecer un par de recitales.
¿Qué sigue en tu carrera?
Lo que viene es tomar buenas decisiones. Muchas puertas se han abierto, pero lo importante es saber por cuál entrar, y cómo. La próxima temporada (de septiembre 2019 a julio 2020) debuto en papeles importantes. Entre estos, La Contessa (Las Bodas de Figaro) en Francia, Lauretta (Gianni Schicchi) en el Teatro Real de Madrid, y Suor Gienoveffa (Suor Angélica) en Japón. Tengo programados conciertos en Francia, Suiza, Rusia y Guatemala. Adicionalmente, puedo compartir que he grabado mi primer disco, que estará disponible a partir de febrero del próximo año.