Programas maliciosos incrementan actividad delictiva.
La empresa de ciberseguridad Kaspersky ha detectado en el segundo trimestre de 2019 un alto número de intentos de infección por troyanos ransomware, los cuales se hacen con el control del dispositivo y piden un rescate, que sufrieron 232 mil 292 usuarios únicos en todo el mundo.
Esta cifra supone un aumento del 46 % frente al primer trimestre de 2018, aunque es un descenso en 50 mil casos frente a los 3 primeros meses de 2019, según el informe de la compañía sobre las amenazas en las tecnologías.
Los ransomware están diseñados para exigir un rescate a la persona que ha visto infectado su ordenador, que puede sufrir desde el cifrado de datos almacenados en el disco duro, hasta el bloqueo del acceso normal al dispositivo.
Los países con mayor proporción de usuarios atacados por este tipo de cifradores y que fueron bloqueados por la empresa son Bangladesh (8.81 %), Uzbekistán (5.52 %), Mozambique (4.15 %), Etiopía (2.42 %) y Nepal (2.26 %).
El informe también señala que durante el mismo período se detectaron 16 mil 17 nuevas modificaciones de ransomware, algunas incluidas en 8 nuevas familias de programas malignos (malware), lo que supone más del doble del número de muestras detectadas en el segundo trimestre del año
precedente.
El aumento de las modificaciones maliciosas y la aparición de nuevas familias “es una señal peligrosa de que la actividad delictiva se está intensificando con nuevas versiones de malware”, indica Kaspersky en un comunicado.
WannaCry sigue siendo el ransomware que mayor número de ataques ha perpetrado, el 23.4 % de los casos en el segundo trimestre del año entre usuarios de los servicios de la firma de ciberseguridad.
“Durante el segundo trimestre del año hemos observado un aumento en el número de nuevas modificaciones de ransomware, a pesar de que la familia GandCrab, uno de los ‘cryptors’ más populares entre los cibercriminales, cerró a principios de junio”, señaló en el comunicado el investigador de seguridad de Kaspersky, Fedor Sinitsyn.
El experto en tecnologías destacó que el caso GandCrab “es un buen ejemplo de lo efectivo que puede ser un ransomware: sus creadores anunciaron el fin de su actividad maliciosa tras afirmar que ganaron una enorme cantidad de dinero extorsionando a sus víctimas”.