El Manchester United perdió la oportunidad de situarse como nuevo líder de la Liga Premier inglesa, al ser incapaz de pasar del empate (1-1) en su visita al campo del Wolverhampton, en un encuentro en el que el francés Paul Pogba desperdició en la segunda mitad una pena máxima que habría concedido el triunfo a los “diablos rojos”.
Había curiosidad por saber si la contundente victoria (4-0) sobre el Chelsea, con la que el United arrancó la temporada, fue un mero espejismo o si de verdad los de Ole Gunnar Solskjaer están dispuestos a escapar de la intrascendencia en la que han vivido instalados en las últimas campañas.
Y para ello, qué mejor rival que el Wolverhampton, un equipo que la pasada campaña se convirtió en un auténtico dolor de muelas para los “diablos rojos”, que no fueron capaces de ganar ninguno de los tres partidos, 2 derrotas y 1
empate.
Si bien Martial no llegó a los 18 minutos por centímetros a un centro de Rashford, 9 más tarde, en el 27, el internacional galo no desaprovechó un nuevo pase del 10 del United para firmar el 0-1.
Enganchado a la velocidad de Traoré, el Wolverhampton logró hacerse el dueño del encuentro, sometiendo al United a un inesperado asedio, que acabó propiciando la igualdad (1-1) con un espectacular tanto del portugués Ruben Neves. EFE