Hizo falta que se unieran el ingenio de Iron Man y la valentía de Captain America, pero al final Avengers: Endgame superó a Avatar para convertirse en la cinta más taquillera de la historia (sin contar la inflación), un récord que da más brillo aún a la era dorada de los superhéroes en el cine.
“A los fans más grandes del universo, desde el fondo de nuestro corazón, gracias”, dijeron en Twitter los hermanos Anthony y Joe Russo, los directores de Avengers: Infinity War (2018) y Avengers: Endgame (2019).
“Una enorme enhorabuena a los equipos de Marvel Studios y Walt Disney Studios, y gracias a los fans en todo el mundo que elevaron a Avengers: Endgame a estas históricas alturas”, afirmó en un comunicado el presidente de Disney, Alan Horn.
El récord fue anunciado el sábado por el presidente de Marvel Studios, Kevin Feige, durante la Comic-Con (EE. UU.), donde la compañía informó sus planes para el futuro ya con los Avengers en el retrovisor.
La marca obtenida por Avengers: Endgame se refiere a términos absolutos de taquilla y no tiene en consideración la variación de precios con el paso del tiempo.
Por ejemplo, en la clasificación de películas más taquilleras contando la inflación, un dato que permite una comparación más ajustada entre filmes de diferentes épocas, Gone with the Wind (1939) encabeza este listado en EE. UU. y Canadá con Avengers: Endgame en el decimosexto lugar, según el portal especializado Box Office Mojo.
La gloria para Avengers: Endgame podría, sin embargo, ser efímera, ya que James Cameron está preparando cuatro secuelas de Avatar (2009) y es probable que antes de lanzar la primera de ellas se reestrene la cinta original y pueda, así, volver a lo más alto. De cualquier forma, el liderato quedará en manos de la todopoderosa Disney, que tras comprar la parcela de entretenimiento de Fox ahora posee los derechos sobre la fantasía de Avatar.
Al margen del futuro, nadie puede quitar el mérito a esta cinta de superhéroes, una guinda ideal a las 23 películas de Marvel de sus tres primeras fases y que contó en su elenco con una constelación de estrellas de Hollywood en la que figuraron Robert Downey Jr., Scarlett Johansson, Chris Hemsworth, Brie Larson, Chris Evans, Chadwick Boseman, Chris Pratt, Mark Ruffalo o Zoe Saldaña.
Este filme llegó a los cines a finales de abril rodeado de una expectación descomunal, tanto que, con 1.224 millones de dólares, destrozó el récord del mayor lanzamiento hasta entonces, que tenía su hermana Avengers: Infinity War con 640 millones.
Con el registro de Avatar entre ceja y ceja, Avengers: Endgame se reestrenó hace unas semanas con algunas escenas inéditas para tener un impulso comercial extra.
Las cuatro películas sobre los Avengers están entre las diez más taquilleras de todos tiempos: Endgame es la primera, Infinity War es la quinta, Marvel’s The Avengers (2012) ocupa la séptima posición, y Avengers: Age of Ultron (2015) está en el noveno lugar. Si a eso se le une que Black Panther (2018) es la décima con mayor recaudación de la historia, queda claro que el cine de superhéroes goza de una extraordinaria salud creativa y comercial en Hollywood.
Iron Man, Captain America, Spider-Man, Hulk, Black Widow, Thor o Black Panther, todos ellos de Marvel, se han convertido en ídolos globales de la gran pantalla en todo el planeta.
Marvel afronta ahora el reto de extender su imperio sin Iron Man o Captain America. Así, el estudio ha fiado su suerte a cintas como The Eternals, con Angelina Jolie y Salma Hayek; una nueva Blade con Mahershala Ali; Thor: Love and Thunder con Natalie Portman de vuelta en la saga como una Thor femenina; y a proyectos sobre Fantastic Four o X-Men.
Sea cual sea el resultado, Marvel tiene claro que la diversidad es una de sus mejores bazas: Scarlett Johansson liderará Black Widow y Brie Larson encabezará la secuela de Captain Marvel, Shang-Chi and the Legend of the Ten Rings será su primera película con estrella asiática (Simu Liu), y Tessa Thompson reveló el sábado que su rol Valkyrie de la saga sobre Thor es LGBTQ.
*Con información de EFE