El serbio le ganó por tercera vez una final de este torneo a Federer.
Novak Djokovic salvó dos bolas de partido y venció a Roger Federer en una gran batalla, por 7-6 (5), 1-6, 7-6 (4), 4-6 y 13-12 (3), en la final más larga de la historia de Wimbledon, para ganar este torneo por quinta vez en su carrera, igualar a Björn Borg, y superar a Rod Laver, y sumar además el segundo grande este año luego del Abierto de Australia, en enero.
La del 2008, con Nadal venciendo a Federer por 6-4, 6-4, 6-7(5), 6-7(8) y 9-7 en 4 horas y 48 minutos, y acabando casi a oscuras, era hasta ayer la final más larga del torneo. En la edición 133, Djokovic se impuso en 4 horas y 57 minutos, estrenando además en ese partido la nueva fórmula del desempate, cuando en el quinto set se llegara al 12-12.
“Intentaré olvidarlo”, dijo Federer al serle preguntado en la pista luego de casi 5 horas de lucha, y provocando las risas de los 15 mil espectadores. “Ha sido un gran partido, y largo, lo di todo. Tuve muchas oportunidades, pero estoy feliz con mi actuación. Felicidades, Novak, ha sido una locura”, dijo el suizo.
“Espero poder darle fe a otra gente y que sepan que a los 37 no todo está acabado”, añadió. Djokovic lleva ya 16 títulos del Grand Slam, acercándose a los 18 del español Rafael Nadal, que no obstante, y gracias al triunfo del serbio mantendrá el puesto de número dos del mundo hoy, con 485 puntos de ventaja sobre Federer.
La carrera triunfal del serbio, campeón el año pasado en el All England Club, continúa en los majors donde ha ganado 4 de los últimos 5 en los que ha participado. Después de su paso por Wimbledon en 2018, con victoria, ganó el US Open y fue segundo del Abierto de Australia.