El francés Julien Alaphilippe logró ayer en la meta de Épernay su tercer triunfo en el Tour de Francia, después de los dos conseguidos el año pasado, y se vistió con el maillot amarillo de líder. El ciclista del Quick Steep, quien partía como uno de los favoritos en el final accidentado de la tercera etapa, atacó antes de lo previsto, en el ascenso a la Cota de Mutigny, de tercera categoría, a unos 16 kilómetros de meta, y mantuvo la renta hasta el final. EFE