El thriller dirigido por Alfredo Porras Smith se estrena el viernes.
El suspenso lo mantendrá al borde de su butaca cuando el telón se abra y comiencen los Juegos asesinos. El primer actor y director Alfredo Porras Smith se pone al mando de una obra que lo llevará por los crímenes más famosos de la historia y las jugadas que el protagonista desarrolla en su afán de sentirse como un verdadero homicida. A la Sala Manuel Galich de la Universidad Popular (UP), 10a. calle 10-32, zona 1, llega este montaje los viernes y sábados de julio a las 20:00. Admisión Q80.
Obsesión
La sala de teatro de la UP enciende sus reflectores para transportarlo hasta la década de los 90 y hasta Barry (Luis Román), un hombre de 40 años obsesionado con los crímenes más sonados de la historia. Con ayuda, primero de su esposa, Elizabeth (Nelly Castillo), y luego de su amante, Lizzie (Ivette Monney), el personaje principal desarrollará Juegos asesinos.
Lo que el protagonista no sabe es que los gritos y los sonidos de sierras, que provienen de su hogar, alertan a su vecina, la señora Roberts (Bitty Herrera), quien se comunica con el sargento Miller (Milton González). “A Barry le gusta sentirse como un asesino y por eso juega a serlo (…) Sin embargo, en el camino involucra a otras personas que desconocen que es un simple entretenimiento”, comenta Alfredo Porras Smith.
Viejos conocidos
Más acostumbrado al teatro clásico y contemporáneo, esta vez Porras Smith da un paso hacia el thriller. En su búsqueda por el texto adecuado, el año pasado se topó con Juegos asesinos: “Le pedí a Milton González que hiciera la adaptación, y posteriormente nos sentamos a elegir a los intérpretes. Se me hizo más fácil seleccionarlos, porque con todos he trabajado y sé lo que cada uno aportaría a su papel”.
Mensajes
En medio de la ironía e inteligencia que revisten al personaje principal, se encuentra, según el director, el mensaje de que no todos los juegos se deben jugar. “En Barry fluirán muchas emociones que harán que el espectador visualice la manipulación que ejerce para lograr sus objetivos”. Otra de las enseñanzas que pretende dejar la pieza es la importancia de la comunicación, resalta Porras Smith.