De acuerdo a estadísticas de la Dirección de Prevención Terciaria de la Subsecretaría de Reinserción y Resocialización de Adolescentes en Conflicto con la Ley Penal, 108 de los 145 jóvenes que han atendido hasta mayo de este año cursan estudios y tienen medidas socieducativas o ya terminaron su sanción.
Carlos Gómez, encargado de Prevención Terciaria, comentó que el 50% de jóvenes a los que les dan seguimiento, no han terminado la primaria, es por eso que entre los esfuerzos que realizan está el mejoramiento de las competencias académicas, para que tengan mayor oportunidad en el campo laboral.
Explicó que el trabajo de dicha Dirección consiste en atender a los jóvenes que han recobrado su libertad o que tienen libertad asistida, para reinsertarlos laboral y socialmente por medio de atención psicológica, orientación y apoyo educativo e intermediación laboral.
Según los registros, hasta finales de mayo de 2019, han asistido a 145 jóvenes, de los cuales el 26 % son mujeres y el 74 % hombres, y del total, el 45 % tiene entre 18 y 19 años. El 13 % cursa 5º y 6º primaria, 26 % está en 3º básico, 20 % estudia el bachillerato, 13 % está graduado de nivel medio y el 7 % estudia en la universidad.
Según Gómez, los porcentajes son positivos, pues reflejan que de los 145 adolescentes atendidos, 108 están estudiando. Esta cifra a su vez se subdivide en 56 jóvenes que estudian y trabajan, 52 que solo estudian, 30 que solo trabajan y 43 que están en fase de terapia psicológica.
El proceso
Al ser remitidos a Prevención Terciaria, los jóvenes son evaluados para ubicarlos en el proceso más adecuado a su situación, por ejemplo, si su nivel de violencia es alto, se envía a terapia psicológica para intervenirlo de forma individual y grupal; además, se les brindan charlas de conocimiento y autovaloración, donde pueden participar los padres de familia o encargados.
Si ya han superado la fase emocional, se les proporciona orientación y apoyo educativo, en donde se les motiva a que continúen su formación académica, por medio de talleres básicos de computación, o si ya son graduados se les apoya con tutorías y reforzamiento para que sigan en la universidad.
A quienes ya pasan del nivel educativo se les ayuda con intermediación laboral, cuyo proceso se inicia con una evaluación con respecto a sus capacidades y experiencias de trabajo; posteriormente, se les orienta en el proceso de elaboración de su hoja de vida, la entrevista laboral y hasta en presentación personal.
La atención que brinda Prevencion Terciaria, a jóvenes mujeres y hombres en conflicto con la Ley Penal, abarca seis meses antes del cumplimiento de la sanción y, seis meses después, por medio del Programa de Post-Sanción.
- Con información de la SBS.