El Atalanta y el Inter de Milán sellaron ayer los últimos dos billetes para la próxima Liga de Campeones y enviaron al Milan a la Liga Europa, en una trigésima octava y última jornada de la Serie A que decretó el descenso del Empoli.
La victoria del Atalanta contra el Sassuolo (3-1) le regaló la tercera plaza y la primera clasificación a la Champions de su historia, mientras que el Inter sufrió hasta el final para doblegar 2-1 al Empoli y defender la cuarta posición de la presión del Milan, al que no le bastó ganar 3-2 al Spal de Ferrara.
Alta tensión
Fue un domingo de alta tensión, con siete equipos, el Inter, el Milan, el Atalanta, el Roma, el Empoli, el Fiorentina y el Génova, que se jugaban la vida en sus respectivos objetivos: la Liga de Campeones y la permanencia en la máxima categoría.
El Atalanta arrancaba como tercer clasificado, empatado con el Inter; el Milan, quinto, necesitaba ganar y un tropiezo de uno de sus rivales para alcanzar la Champions; la Roma, sexto, apelaba a un milagro pues necesitaba ganar y que sus tres rivales directos perdieran.
Horas antes, el técnico Massimiliano Allegri se despidió del Juventus Turín con una intrascendente derrota 0-2 contra el Sampdoria, decidida por
los goles del francés Gregoire Defrel y de Gianluca Caprari.