El Gobierno de Guatemala celebró el resultado de la consulta popular que se llevó a cabo el miércoles en Belice, con la cual el pueblo decidió avalar que el diferendo territorial, insular y marítimo sea arbitrado en la Corte Internacional de Justicia (CIJ), por lo que el presidente Jimmy Morales elogió los resultados, que buscan una solución pacífica.
El mandatario resaltó la importancia del diálogo y la participación ciudadana, los cuales fortalecen las democracias, y que se para esta consulta se proyectaron “resultados positivos para una solución pacífica”, dijo. Morales anunció que en los próximos días enviará una propuesta al primer ministro de Belice, Dean Barrow, con el fin de que los Ministerios de Relaciones Exteriores de ambos países notifiquen los resultados ante la CIJ.
El Jefe de Estado guatemalteco resaltó que la participación de los guatemaltecos y beliceños en las urnas permite “construir sociedades más justas y democráticas”.
La canciller guatemalteca Sandra Jovel se unió a la felicitación del mandatario: “debemos valorar la expresión popular de nuestros ciudadanos”, dijo y agregó que este proceso dejará un gran legado porque se realizó en el marco del respeto y la paz. “Nuestra confianza está depositada en la justicia internacional”, indicó.
Almagro felicita por la solución pacífica
El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, felicitó al Gobierno y pueblo beliceños por la organización y los resultados del referéndum, indicando que “abre un camino pacífico hacia una resolución” por vía de la CIJ.
El 15 de abril del año pasado, Guatemala también celebró su consulta popular para someter el litigio con Belice ante la CIJ. De los más de 7.5 millones de ciudadanos registrados en el padrón electoral, el 26.33% acudió a las urnas, según el Tribunal Supremo Electoral (TSE), dando como resultado un 95.89 % de votos a favor del “Sí”.
Lo que sigue es a La Haya
Ahora que los pueblos de Guatemala y Belice dieron luz verde para continuar con el camino hacia la solución del histórico diferendo territorial, insular y marítimo, ambas partes deben notificar a la Secretaría de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) sobre el caso.
Fuentes diplomáticas de nuestro país refieren que, posterior a la notificación, se tiene un año para presentar los argumentos: la demanda en el caso de Guatemala y la contrademanda por parte de Belice. Con los referendos realizados, y el aviso a la CIJ, las dos partes aceptan la jurisdicción del ente de justicia.
La Organización de Estados Americanos (OEA), que ha dado acompañamiento al proceso, gobiernos y otros órganos internacionales como el Sistema de Integración Centroamericana, han expresado su beneplácito por el cumplimiento del Acuerdo Especial que Guatemala y Belice firmaron en 2008 respecto de la realización de las consultas.
“La OEA seguirá apoyando el proceso, ahora en camino a la CIJ para ayudar a encontrar una solución”, pronunció la instancia regional.