El Liverpool remonta al Barcelona y es finalista de la Champions.
El Liverpool ganó 4-0 al Barcelona ayer, y remontó el 3-0 de la ida de las semifinales de la Liga de Campeones, por lo que se clasificó para su novena final de la máxima competición continental.
Los hombres de Jürgen Klopp superaron con claridad al conjunto azulgrana que, minimizado durante los 90 minutos, perdió la opción de ganar su sexto título el próximo 1 de junio en el estadio Wanda Metropolitano del Atlético de Madrid.
El gol en la primera parte del belga Divock Origi, el doblete del holandés Georginio Wijnaldum en la segunda y el tanto final, en el minuto 79, otra vez de Origi, clasificaron al Liverpool.
El primero en acertar fue Origi, quien marcó en el minuto 7 al recibir un rechace del portero Marc-André ter Stegen, en un disparo del suizo Xherdan Shaqiri.
En el segundo tiempo, Wijnaldum apareció a los 9 minutos para aprovechar una asistencia de Tren Alexander-Arnold. Después, repitió en el minuto 56 con un gran cabezazo, a pase de Shaqiri.
Origi, quien comenzó la remontada, la cerró después de un despiste garrafal de la defensa del Barcelona, que se durmió en un córner cobrado por Alexander-Arnold, el cual marcó el belga a placer.
Con ello, la historia, cíclica como ella sola, devolvió a un histórico Liverpool a su milagro de Estambul y rememoró las pesadillas de un Barcelona que volvió a visitar Roma un año después, y que quedó eliminado de la Liga de Campeones en un naufragio para la posteridad.
Una ola en forma de You’ll Never Walk Alone recibió al Barcelona en Anfield. Esa fue la parte amable. La realidad a la que venían fueron los gritos ensordecedores que les despertaron al poner en juego la pelota.
El silbatazo final lo confirmó. Anfield era el centro de la alegría mundial para un Liverpool histórico. Habían logrado lo que parecía imposible, habían devuelto al Barcelona a Roma, rescatado Estambul y estarán en la final.