El Mercado Común del Sur (Mercosur) cambió de rumbo la semana pasada y frenó su proceso de integración política al suspender la elección directa de sus parlamentarios, con el argumento de ahorrar recursos económicos.
El anuncio, hecho en Asunción por el canciller paraguayo Luis Alberto Castiglioni, supone un parón en el proceso político que iniciaron estos países en 1991, ya que, según dijo, no existe una “real urgencia” por abordar la modificación del Parlasur, para dotarle de mayores competencias.
De esta manera, el bloque detiene el proceso de adoptar la elección directa de parlamentarios, cuya fecha límite se fijó en el 31 de diciembre de 2020, según acordó en 2014 el propio organismo. La modificación no establece un nuevo límite para implementar ese tipo de elección, del que hasta ahora solo había tomado parte Paraguay, que envió sus primeros parlamentarios elegidos de forma directa en 2008, mientras que el resto de países miembros no tenía aún una legislación al respecto.
A pesar de que el canciller sostuvo que la decisión de los cuatro mercosurianos era avanzar hacia un mejor funcionamiento político del bloque, la realidad es que “ni siquiera hay un proyecto” para refundar el Parlasur, como reconoció Castiglioni. Asunción, EFE