La llamada Costa Sur del país es una franja de territorio que guarda grandes recursos naturales y culturales, y es uno de los ejes del desarrollo nacional, pues es asentamiento de grandes industrias y paso para el comercio nacional e internacional, ya que lleva a uno de los principales
puertos marítimos.
Esta franja de tierra también ofrece terrenos aptos para los cultivos, pues tiene los beneficios de la capa volcánica que contribuye con minerales importantes para la fertilidad de la tierra, y es por ello que allí se han desarrollado industrias actuales como la actual azucarera, y la del algodón en otros tiempos, sin olvidar la fruticultura y el cultivo de
palma oleaginosa.
Por estas razones es de vital importancia que los caminos que pasan por la Costa Sur sean de calidad, para posibilitar el paso de mercancías y bienes que se producen allí y que necesitan llegar a los mercados nacionales e internacionales.
Son conocidas las circunstancias en las que quedó la infraestructura vial del país, tras el abandono en que fue dejada por gobiernos que no supieron dar mantenimiento ni ampliación, heredando una red vial colapsada que ha sido muy difícil volverla a la vida útil.
El actual Gobierno, por medio del Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda (CIV), ha sabido enfrentar este problema, habilitando tramos carreteros importantes después de sortear gran cantidad de problemas administrativos, financieros y judiciales.
Como muestra, ayer el presidente Jimmy Morales viajó hacia la Costa Sur para comprobar los trabajos que se han realizado en la infraestructura vial, y pudo ver que han sido habilitados 93 kilómetros en el tramo de la CA-02, que conduce hacia la frontera con México.
Los empresarios, agricultores, comerciantes y generadores de turismo han obtenido una respuesta clara por parte de las autoridades de gobierno: ahora cuentan con carreteras asfaltadas que les facilitarán su desplazamiento por la zona para concretar sus actividades.