Empezaré por decir que Deportemas es una palabra compuesta, que lleva implícito el concepto: temas deportivos, porque eso es lo que voy a hacer, llevar diversidad de temas relacionados con este bello quehacer humano que se llama deporte.
Sin embargo, diré que no es fácil definir qué es deporte; el Diccionario de la Real Academia Española define “deporte” como recreación, pasatiempo, generalmente al aire libre.
He de decir que los que practican alguna disciplina deportiva saben que hay motivaciones no declaradas, un oculto espíritu que impulsa al hombre a practicarlo, pero en forma acentuada a los que lo hacen en afán competitivo.
Ese espíritu los lleva a romper marcas, a mejorar tiempos y alcanzar metas cada vez más altas. Cuando el atleta descubre su verdero potencial, se impone a sus propios objetivos, que pueden ser ganar un campeonato nacional, centroamericano, panamericano y, por qué no, una medalla olímpica.
Para dar a todos los atletas oportunidad de realizar sus sueños, los organismos rectores apoyan a sus deportistas y organizan una serie de competencias que abren todo un abanico de posibilidades a la juventud chapina, para superarse y convertirse en héroes del deporte guatemalteco.
Para citar algunos ejemplos: Erick Bernabé Barrondo, un joven provinciano que se esforzó por lograr sus metas, las cuales alcanzó con creces en la modalidad de marcha atlética dentro de la disciplina del atletismo, logrando una flamante medalla olímpica de segundo lugar para su país, y orgullo nuestro.
Otro de los grandes es Jorge Vega, quien en gimnasia rítmica ha sentado sus reales a nivel mundial, codeándose con los más destacados. Juan Maegli, en navegación a vela; Lester Martínez, en boxeo; José Rolando de León, en la modalidad de bench press de levantamiento de pesas, entre otros, son el testimonio vivo de Las bondades del deporte.
- Por Enrique Bremermann