Aumenta desesperación en México al escasear agua y alimentos.
Pasan los días y crece la incertidumbre y la de-sesperación de los migrantes tras haberse iniciado las repatriaciones desde el estado de Chiapas y con la llegada de convoyes con agentes de la Policía Federal de México, y al escasear el agua y la comida.
En las inmediaciones de la estación migratoria Siglo XXI de Tapachula, más de 500 migrantes desesperados se mantienen en una tensa espera para ser atendidos por el Instituto Nacional de Migración, mientras miles más aguardan en el interior a que se les entregue un salvoconducto para cruzar el país.
El pasado jueves habían sido repatriados más de 200 haitianos y cubanos. Otros han buscado en qué emplearse mientras esperan el pase de salida. Trabajan en lo que esté a su alcance, como Óscar Steven García y Elvin René Arriola, de Honduras.
“Nosotros estamos trabajando, ejerciendo lo que es nuestra gastronomía. Nuestras esposas hacen trenzas africanas y extensiones”, confió Elvin a Efe.
Dijo que esperan que “las organizaciones que están apoyando a los migrantes tomen cartas en el asunto para reactivar el proceso migratorio pendiente, porque muchas personas necesitan legalizarse, estabilizarse para poder ejercer su profesión, oficio o cualquier tipo de manera para poder sobrevivir”.
Bhakta Bhattaai, de Nepal, manifestó: “Vengo a México para tramitar mis documentos a Estados Unidos. Yo trabajo de cocinero para ganar un poco de dinero”.
Muchas madres de la República Democrática del Congo manifestaron en Tapachula que necesitan comida, agua y pañales para los niños, ya que tienen más de 20 días en el campamento afuera de la estación Siglo XXI.