Autoridades velan por salud de la población reclusa.
Con la firma de un convenio de cooperación entre los ministerios de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) y de Gobernación, las clínicas médicas que están en los centros carcelarios serán remozadas para fortalecer la atención de la población reclusa que necesite del servicio.
Las mejoras beneficiarán especialmente a quienes presentan tuberculosis y a quienes han adquirido el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), pues su tratamiento se dará en espacios dignos, infomaron las autoridades.
Además, con esta iniciativa se contribuye con el Sistema Penitenciario a continuar los proyectos de dignificación de los privados de libertad, con la cual también se garantizan sus derechos, en este caso a la salud.
“Se ha tenido acercamientos con las autoridades del Ministerio de Gobernación, para unir esfuerzos en la recuperación de la infraestructura de las cárceles, con el fin de que los pacientes que están en esos recintos reciban un trato adecuado”, dijo Carlos Soto, titular del MSPAS.
Lucha contra la tuberculosis
De acuerdo con la cartera sanitaria, las acciones de prevención y mejor atención que se impulsan en las cárceles también responden al compromiso establecido en el plan de Gobierno por medio del Programa Nacional contra la Tuberculosis, en el cual se ha puesto en marcha la estrategia denominada Tratamiento directamente observado.
En este sentido, el personal de salud juega un papel importante con la verificación de cada paciente, para que cumpla y complete a cabalidad su tratamiento.
En caso de que el enfermo no pueda acercarse a los servicios de salud, los especialistas los visitarán en su domicilio para garantizar la toma puntual de sus medicamentos.