Decenas de migrantes intentaron ingresar a Estados Unidos desde la zona de Playas Tijuana, en el estado mexicano de Baja California, y al menos unos 20 lo lograron, para entregarse a las autoridades migratorias estadounidenses.
Los indocumentados, casi un centenar según los testigos, llegaron a la orilla del mar en la localidad mexicana para intentar brincar la valla metálica que en esta zona delimita la frontera entre los dos países.
Mujeres, niños y hombres comenzaron a escalar las barras de acero, a las que en noviembre pasado las autoridades de EE. UU. le añadieron una alambrada con púas.
Los migrantes que intentaron cruzar forman parte de las caravanas que han llegado a Tijuana, Baja California, desde noviembre pasado, y que están a la espera de recibir el asilo humanitario estadounidense.
Estas personas lograron cruzar, y por lo menos se observó que una veintena de ellos se entregaban a los agentes de la Policía Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés). Tijuana, EFE