Fuerzas combinadas del Ejército de Nicaragua confiscaron cuatro bultos con 221 paquetes de cocaína en una finca cercana al Gran Lago o Lago de Cocibolca, informó hoy esa institución castrense.
La droga fue incautada la noche del viernes cuando una patrulla lacustre militar realizaba un operativo de rutina en el Gran Lago y observó señales lumínicas sospechosas en una finca, por lo que procedieron a allanarla, dijo a periodistas el jefe del Destacamento Militar Sur del Ejército de Nicaragua, teniente coronel Wilber Cruz.
“Se dispuso a tropas de la zona, encontrando abandonados seis bolsos conteniendo un cargamento de 221 paquetes de cocaína”, indicó el jefe militar.
Explicó que los militares no encontraron resistencia alguna al llegar al lugar y que, por lo visto, los que tenían el cargamento decidieron darse a la fuga sin enfrentar a las autoridades.
“Las bolsas estaban dentro de la casa abandonada y no había nadie”, aseguró el jefe militar, quien dijo que esa finca está ubicada en una zona alejada y de difícil acceso terrestre.
Las autoridades desconocen de momento el nombre del propietario de la finca.
La droga fue entregada a las autoridades competentes para la judicialización del caso.
La operación se dio como parte de la estrategia del “Muro de Contención”, que tiene como objetivo evitar la circulación de la droga en los núcleos poblacionales, para la cual mantienen “estrechos lazos de cooperación” con los países de la región, Estados Unidos, México y Rusia, según el Ejército nicaragüense.
Nicaragua se encuentra geográficamente ubicada en un corredor de alto tráfico de la droga que se produce en Suramérica y que luego es traslada a Norteamérica, donde operan, principalmente, los carteles mexicanos y residen los principales consumidores. Managua, EFE