En julio de 2012, el Consejo Nacional de Seguridad aprobó la Política Nacional de Seguridad, la cual marca los lineamientos para prevenir los riesgos y amenazas contra la sociedad. Con este instrumento legal es posible la coordinación interinstitucional de los entes de Estado que conforman el Consejo, y así garantizar las acciones de carácter preventivo o reactivo para mantener la seguridad en el país.
Para conocer detalles del avance en la prevención y lucha contra el crimen y la violencia, por medio de su Secretaría Técnica, el Consejo Nacional de Seguridad trabaja con los insumos de información que le proveen las entidades de seguridad para establecer estadísticas que marquen los indicadores que permitan crear, monitorear y ajustar las estrategias.
Los índices marcados en 2018 indican que algunos delitos disminuyen, gracias a las acciones realizadas por los entes de seguridad que lograron prevenir hechos delictivos o con acciones directas que dieron combate a los grupos y actores criminales.
Por ejemplo, el delito de robos a residencias bajó 18.63 por ciento, respecto al año anterior; así como el robo a comercios, que bajó 10.50 por ciento, y el robo de vehículos, que registró una reducción de 13.03 por ciento.
En este conteo sobre seguridad ciudadana debe considerarse el dato que muestra que en 79 municipios se reportaron cero homicidios, un indicador de la baja de la violencia en el interior del país.
Estos resultados son consecuencia del compromiso de las fuerzas de seguridad por garantizar la seguridad a los guatemaltecos y sus bienes. Asimismo, la especialización de los agentes de la Policía Nacional Civil es un elemento importante para fortalecer la institución.
Una muestra de las acciones diarias que se realizan a favor de la seguridad ciudadana son los operativos durante este primer mes del año, con el propósito de capturar delincuentes, recuperar territorios y ampliar los ejes de seguridad, para mayor control.
Además hay que sumar los planes que el Ministerio de Gobernación anunció, como la creación de la Unidad de Comando de Incidentes Críticos y la Unidad de Reacción Antiterrorista, con el propósito de prevenir acciones violentas contra la ciudadanía.