Catalanes se clasificaron para los cuartos de la Copa del Rey.
El Barcelona, con un doblete de Ousmane Dembélé y un tanto de Lionel Messi, remontó el 2-1 en contra de la ida para sellar el pase a los cuartos de final de la Copa del Rey contra el Levante (3-0), a la espera de que los despachos den su veredicto sobre la supuesta alineación indebida del equipo azulgrana en el Ciutat de Valencia.
Un fantasma apareció en la previa. Tenía forma de supuesta irregularidad del equipo catalán en la ida, con la alineación del jugador del filial, Juan Brandariz Movilla, Chumi, quien arrastraba una sanción por acumulación de amonestaciones en el Barsa B.
Una falta lejana en el minuto 15, que Aitor Fernández rechazó, fue el punto de inflexión para que el argentino se activara.
Sin Luis Suárez, el 10 azulgrana ocupó la posición de 9 y el Levante sufrió su desequilibrio cuando el rosarino retrasó su posición original y conectó con la medular.
Dominio azulgrana
Con Messi conectado, el Barcelona fue un vendaval. Primero avisó Coutinho con un latigazo desviado, siguió Messi con un disparo cruzado y raso que desvió con el pie el guardameta del Levante.
También se sumaban a la fiesta de ocasiones Murillo y Vidal, con dos remates de cabeza que salieron desviados por poco.
Con el Levante desarbolado, el premio para los azulgranas llegó a trompicones y con un único protagonista: Ousmane Dembelé. El francés, eléctrico por la derecha, se enfundó el traje de goleador. Messi fue su asistente de lujo.
Los goles
Dembelé abrió la lata en el minuto 30, con un gol de rebote y, un minuto después, anotó el segundo gracias a la ayuda del guardameta Fernández, quien desvió el balón a la red cuando intentaba rechazar el disparo mordido.
En la segunda mitad, Leo Messi anotó el definitivo 3-0, en el minuto 54, después de una aparición de Nelson Semedo por la derecha y una asistencia sobre el argentino que picó sobre la salida del meta.