El crédito al sector privado muestra un crecimiento del 6.8 %, al 3 de enero de este año.
Después de experimentar una desaceleración, el crédito al sector privado y la inversión en bienes de capital, entre otras variables, está mostrando una recuperación, lo cual impulsaría el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) durante este año, de acuerdo con Sergio Recinos, presidente del Banco de Guatemala (Banguat), y Paulo de León, director del Central American Business Intelligence (CABI).
Ayer, durante un foro organizado por la Cámara de Industria de Guatemala (CIG), Recinos manifestó que el crédito al sector privado registró un alza del 6.8 %, al 3 de enero de este año, respecto del 3.8 % con el que cerró en 2017.
“Vemos que las remesas familiares continúan creciendo, las importaciones se comportan dinámicamente y el crédito muestra una recuperación. En general, se observa una mejora en la parte estrictamente económica, aunque hay riesgos de carácter extraeconómico que esperamos que no se materialicen”, expuso.
De León indicó que se está revirtiendo la caída en la inversión por bienes de capital, el precio de las materias primas está aumentando y el índice de la actividad industrial muestra una recuperación.
Riesgos
Juan Carlos Tefel, presidente de la CIG, dijo que las elecciones generales, la incertidumbre política y el desaceleramiento que se prevé para Estados Unidos representan riesgos para Guatemala.
En ese contexto, afirmó que desde esa gremial se promoverá la certeza jurídica, el combate al contrabando y a la corrupción; además, se impulsarán medidas que ayuden a elevar la competitividad.
Proyección industrial
Un crecimiento de entre el 2 % y 4 % se prevé para el sector industrial en este año, impulsado por un buen desempeño del subsector de servicios, indicó Paulo de León, director del Central American Business Intelligence.
El economista dijo que, a septiembre, el índice de actividad industrial tuvo un decrecimiento del 2 % y que la expectativa es que cerró 2018 en -1 %.
“Se prevé que 2019 será un mejor año para el sector industrial y la economía en general. Hay dos riesgos que podrían afectar este desempeño, en el ámbito externo sería una mayor depreciación del peso mexicano, mientras que en el interno está la falta de certeza jurídica”, subrayó.