Un 3.3 % creció la actividad económica en octubre, derivado de un resultado positivo que experimentaron, principalmente, los servicios privados, comercial al por mayor y al por menor, transporte, almacenamiento y comunicaciones; industrias manufactureras, y agricultura, ganadería, caza, silvicultura y pesca, de acuerdo con el Banco de Guatemala (Banguat).
El Índice Mensual de la Actividad Económica (IMAE), el cual emplea el Banguat para estimar el desempeño de los diferentes sectores productivos, evidenció una baja respecto del mismo período de 2017, cuando se situó en 3.7 %.
A su vez, la serie tendencia-ciclo registró una tasa de crecimiento interanual de 3.4 %, superior al 2.6 % observado en el mismo mes del año previo.
“El IMAE ya acumuló seis meses consecutivos de crecer a tasas arriba del 3 %, lo que nos da certeza de que el crecimiento económico de este año estará situado en el valor central (3 %) de un rango de entre 2.8 % y 3.2 %”, manifestó Sergio Recinos, presidente del Banguat.
Agregó que, en noviembre, el Índice de Confianza de la Actividad Económica (ICAE) se situó en 31.73 puntos, lo que evidenció una leve mejora en comparación con el 29.47 % de octubre. El año pasado, la economía nacional cerró con un aumento del 2.8 %.
Previsiones de organismos
En octubre, los organismos internacionales actualizaron sus proyecciones económicas mundiales. En el caso de Guatemala, el Fondo Monetario Internacional prevé un incremento del 2.8 % en el Producto Interno Bruto (PIB).
“Apuntalado por un sólido marco macroeconómico, la economía continúa sorteando las tensiones políticas internas y desafiando bien las condiciones externas. Se espera que el crecimiento en 2018 siga siendo moderado, debido a las condiciones de las pérdidas comerciales para los productos de exportación clave, rendimiento de la inversión por debajo del par, y la imposibilidad de reabrir una gran empresa minera, debido a una orden judicial”, explicó Esther Ruiz, jefa de la Misión del FMI, que visitó el país del 5 al 9 de noviembre.
Por otro lado, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe estimó un 2.9 %, mientras que el Banco Mundial calculó un 2.6 %.
En ese contexto, Ruiz dijo que el desafío a corto plazo de Guatemala es asegurar la aceleración del crecimiento en 2019, en medio de elecciones generales y una mayor incertidumbre global.
Debido a lo anterior, recomendó orientar las políticas a apoyar la demanda en el corto plazo, la cual estaría impulsada por una mayor ejecución en el gasto público y el estímulo fiscal incluido en el Presupuesto de 2019.