Esta semana se celebra la tradicional Quema del Diablo, por lo que es buen momento para hacer una breve revista de las apariciones del Señor Oscuro en los cómics.
Lucifer, Mefistófeles, Belcebú o Satán. Como sea que se elija llamarlo, el diablo ha tenido una trayectoria larga y colmada de historias desde sus humildes comienzos, como un adversario sin nombre en el libro de Job. Su estatus como símbolo reconocible instantáneamente y ciudadano de dominio público sin derechos de autor, lo ha convertido en un infaltable personaje en tramas en las que se necesita un villano de maldad sin límites.
No es de extrañar, entonces, que el diablo sea una figura popular de los cómics. Los libros de historietas, especialmente los de superhéroes, rara vez manejan matices sutiles de moralidad. Por eso, tener una figura de mal puro en el bolsillo y lista para usar en cualquier momento es algo muy útil.
La primera vez que apareció un diablo en los cómics fue en Capitán Marvel Jr #4 (1943). El malvado Sabbac obtiene sus poderes al pronunciar su propio nombre, lo que le infunde habilidades otorgadas por seis demonios. Sin embargo, las apariciones del diablo durante la Época Dorada del Cómic por lo general son de índole cómica.
Cuando los cómics de superhéroes decidieron tratar de presentar al diablo como una amenaza legítima, fueron un poco cautelosos al referirse a él explícitamente como Satanás. Temían posibles consecuencias, como penalizaciones de la Autoridad del Código de Comics, reacciones violentas de los grupos religiosos, entre otras.
Cuando Marvel presentó al diablo en sus páginas, lo hizo con el personaje Mephisto, basado en el Mefistófeles de Fausto, quien ha servido como un villano para Silver Surfer, Thor, los Vengadores, Daredevil, los Cuatro Fantásticos y Black Panther, así como, más notoriamente, para estar detrás de la anulación del matrimonio de Spider-Man. Mas, Mefisto está lejos de ser el único demonio de la editorial. También han figurado Marduk Kurios, Azazel y Satannish.
Para no quedarse fuera del juego del diablo, DC Comics tiene varios personajes pseudosatánicos. Uno de los más destacados es Lucifer Morningstar, creado por Neil Gaiman y Sam Kieth. Esta versión se basa en gran medida en el trágico y heroico ángel caído de John Milton en Paradise Lost. Otros demonios de DC han incluido a Nerón, CW Saturno, Lord Satanus y Lady Blaze.
Tal vez el demonio más conocido de los cómics independientes sea Malebolgia, quien fue el gran malvado del Spawn, de Todd McFarlane, durante muchos años. Dignos de mención también son el Satanás, del Hellboy, de Mike Mignola; y Señor Diablo, de Johnny the Homicidal Maniac.
