Quizá la cooperación cubana más visible y aplaudida en Guatemala ha sido la médica, con las brigadas de galenos que se han sumado para atender las necesidades de salud, especialmente en el interior del país, así como las becas para estudiar Medicina en aquel país, que han beneficiado a decenas de jóvenes guatemaltecos, y la llamada Operación Milagro, que significó la instalación de cuatro centros oftalmológicos en Alta Verapaz, San Marcos, Villa Nueva y Jalapa.
Pero hay otro tipo de cooperaciones que se han establecido a lo largo del tiempo, como la Cooperación Técnica, que da lugar al intercambio de especialistas, profesionales, investigadores y profesores universitarios, así como la oportunidad de pasantías en diferentes disciplinas.
Lo más reciente en las relaciones bilaterales entre estos dos países es la visita del vicepresidente guatemalteco Jafeth Cabrera, quien hoy será invitado de honor para la firma del instrumento de profundización del Acuerdo de Alcance Parcial (AAP), que realizarán los ministerios de Economía de ambas naciones.
El AAP fue suscrito en 1999 y ratificado en 2001. Por ello, se hace necesario ampliar las posibilidades de comercio entre ambas naciones, para sumar y fortalecer la balanza comercial y abrir las puertas de ambos países para el ingreso de nuevos productos.
El 23 de abril de 1960 se rompieron los lazos diplomáticos entre Cuba y Guatemala, a raíz de que el Gobierno de Guatemala denunciara ante la Organización de Estados Americanos que Cuba se preparaba para invadir el país, lo cual provocó la protesta de los cubanos y el retiro de su sede diplomática de la tierra del quetzal.
Fue hasta 1998, durante el gobierno de Álvaro Arzú, cuando se restituyeron los lazos de amistad y cooperación entre estos dos países. Los primeros documentos que se firmaron de manera bilateral en ese año fueron: el Acuerdo sobre colaboración entre los ministerios de Relaciones Exteriores y el Acuerdo de turismo entre el Instituto Guatemalteco de Turismo y el Ministerio de Turismo de Cuba. De esta manera comenzó una nueva historia en las relaciones diplomáticas y comerciales, que hoy se fortalecen con la firma del AAP.