Las autoridades de Estados Unidos, Colombia, España y Australia desmantelaron una banda dedicada al tráfico de cocaína en vuelos comerciales, que era liderada por un ciudadano del país ibérico, y capturaron a 30 de sus integrantes, en el marco de la Operación Embajador.
La acción permitió, además, el decomiso de 790 kilos de cocaína, 10 vehículos, 21 teléfonos celulares, 1 arma de fuego, 8 pasaportes y más de US $200 mil.
Según las fuerzas de seguridad, se detuvo a 11 personas en Colombia, 10 en España, 6 en Australia y 3 en Estados Unidos, entre ellos el señalado jefe de la mafia, Jorge Juan Merlo, conocido como Mono y Pálido.
La droga, procedente del suroeste colombiano, era enviada principalmente a los otros 3 territorios citados, y el pago se hacía mediante operaciones en casas de cambio, explicó el director de la Policía del territorio sudamericano, Jorge Hernando Nieto.
Merlo “tiene procesos judiciales abiertos” en Colombia, Estados Unidos, Europa y Australia, “por tráfico de drogas”, agregó la Policía.
“La cooperación internacional fue fundamental para el éxito de la acción, que constituye uno de los grandes golpes dados al narcotráfico en los últimos tiempos”, manifestó Nieto
La directora especializada contra las violaciones a los derechos humanos, de la Fiscalía colombiana, Stella Sánchez, afirmó que de los detenidos en el país, 8 aceptaron los cargos, y pueden pagar entre 12 y 30 años de cárcel.
