El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, anunció la refundación del sistema de energía eléctrica, lo que supone el fin a la mala administración, corrupción y contratos leoninos con empresas generadoras que han llevado a “una situación calamitosa” a la estatal de electricidad.
“Ha llegado el momento de refundar el sistema de energía eléctrica, cueste lo que cueste; vamos a renegociar todo lo que tengamos que renegociar y vamos a dar por terminado todo lo que tengamos que dar por terminado”, indicó.
La estatal Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) opera desde hace años con pérdidas millonarias, y su servicio resulta caro para los usuarios debido al alto coste que paga la institución por kilovatio de energía térmica, hídrica, eólica y biomasa, por ejemplo.
“Debemos darle vuelta a todo para que el pueblo hondureño finalmente reciba un servicio de calidad eficiente y moderno”, subrayó el gobernante.
Ajuste y subsidio
Señaló, además, que el Gobierno fue notificado de que desde el 1 de octubre la Comisión Reguladora de Energía Eléctrica aprobó un ajuste tarifario al servicio, producto de variables internacionales, principalmente el precio del combustible, que ya se acerca a los US $80 el barril.
“Esta situación repercute fuertemente en las finanzas de la ENEE, y en la medida en que esta empresa no puede honrar sus compromisos con generadores de energía y otros proveedores, el Estado debe sacrificar partidas muy importantes destinadas a seguridad, salud, educación y obras de infraestructura”, recalcó.
Ante esa situación, Hernández dijo que, para proteger el bolsillo de los hondureños, el Gobierno ha decidido otorgar un bono de energía para los consumidores de menos de 300 kilovatios hora al mes.
“Durante un período de 9 meses, vamos a otorgar un alivio a más de 1.5 millones de familias; es decir, al 80 por ciento de los abonados de la ENEE, que en total son 1.8 millones”, explicó.