Homero, Morticia, Abuela, Lucas, Merlina y Pericles son góticos, macabros, misteriosos y tienen un sentido del humor algo retorcido. Los Locos Addams llevan su mundo siniestro al escenario, en una historia en que los adultos deberán lidiar con el hecho de que los niños han crecido ¡y con ideas descabelladas! Este musical llega a la cartelera este fin de semana y se presentará los sábados y domingos, hasta el 4 de noviembre, a las 16:00, en el Teatro Dick Smith, del Instituto Guatemalteco Americano, ruta 1 4-05, zona 4. Admisión: platea Q150 y balcón Q100. Los boletos están a la venta en Todoticket.
La armonía
La familia Addams tiene una concepción algo “distinta” de la vida: estar triste significa ser feliz y lo imprudente es lo correcto. Esa armonía, en la que Homero (Johnnie Quijada) y Morticia (Paola Tirado) han trabajado durante cientos de años, amenaza con romperse luego de que su hija Merlina (Ximena Tercero) conoce a Tomás Beineke (Oscar Valle), un joven dulce, respetuoso e inteligente.
Con la llegada de Tomás, los Addams idearán un plan que no tardará en salirse de control. Como resultado, terminarán sumergidos en una desastrosa y divertida velada, en la que se revelarán secretos, amoríos y sentimientos cuestionados, pero siempre al ritmo de la música. “Los protagonistas nos llevarán a conocer las peculiaridades de cada familia con canciones. Cada momento se apoya en géneros que van desde la balada hasta el pop rock”, resalta Kristine Klanderud, directora.
Con su esencia
Mientras Homero aporta la mayor parte cómica y romántica al musical, Morticia, su esposa, se mantiene un tanto fría. Klanderud reconoce que, para conservar la esencia de cada personaje, el proceso de selección del elenco, conformado por 20 intérpretes, se dio entre no menos de 100 postulantes: “Necesitábamos gente que se identificara con el papel, pues cada uno está lleno de sorpresas”.
Klanderud destaca que en la puesta en escena de Los Locos Addams, producida por Spotlight, el público podrá recordar las fantasías presentadas en las películas, series y dibujos animados. “A pesar de ser tan distintos, siempre existe un personaje que nos atrapa y con el que nos identificaremos”, puntualiza.
