Durante el foro Energía Eléctrica, Factor Clave de Competitividad, organizado por el Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN), empresarios, analistas y expertos discutieron sobre los avances y retos del sector de energía eléctrica en Guatemala, y el aporte que los primeros han significado para el progreso de la nación.
De tal cuenta, el presidente del CIEN, Jorge Lavarreda, expuso que la “producción de electricidad aumentó de 2 mil 318 gigavatios producidos en 1990 a 10 mil 878, en 2016, además de los adelantos significativos en el aumento del índice de electrificación, de 48.3 % en 1996 a 92.1 % en 2016”.
Asimismo, el director del Área Económica del Centro, Hugo Maul, añadió que dentro de los resultados positivos también se cuentan la reducción de tarifas, una matriz energética segura y diversificada con participación de fuentes renovables, y la reducción de la dependencia de los precios internacionales en los hidrocarburos.
Maul indicó que lo antes mencionado se dio “bajo un marco de respeto a los principios que se determinaron cuando inició el proceso de privatización”.
Los riesgos
Sobre los desafíos, el analista del CIEN destacó como uno de los factores de riesgo “la conflictividad social en el área rural del país, lo cual ha impactado negativamente en las inversiones privadas y en el crecimiento de nuevas inversiones”.
También comentó que el problema radica en las “recurrentes críticas llamando a la nacionalización de la energía eléctrica y a desafíos de cobertura, especialmente en los alrededores de donde se produce la misma energía eléctrica”.
Por su parte, María Isabel Bonilla, investigadora asociada del CIEN, hizo énfasis en que “es necesario que se tomen medidas para que haya certeza jurídica para nuevas inversiones, ya que sin ella será difícil que el sector siga desarrollando su eficiencia y mejorando en conjunto”.
*Con información de Brenda Jiguan/DCA.