Ganó más dinero que ningún otro actor de Hollywood en 2017, pero los ceros de su cuenta bancaria no le quitan el sueño y solo quiere seguir “trabajando duro”. Así se presenta Mark Wahlberg, quien explica que lo que más le interesa es ampliar su obra como intérprete y productor.
Perfil bajo
“No sé cómo determinan quién obtuvo qué, pero sí sé que no abrí mi balance bancario a nadie”, ironiza Mark Wahlberg, que esta semana estrena el filme de acción Mile 22.
El actor dice que está agradecido por estar en un lugar por el que ha trabajado mucho y en el que puede hacer las películas que quiere. Con esto, asegura, puede mantener un perfil bajo: “Hay muchos proyectos que deseo hacer, algunos de los cuales quiero financiar yo mismo (…) Solo trabajo y no me preocupo por nada de esas cosas”, añade.
Con cintas como Transformers: The Last Knight y Daddy’s Home 2 Wahlberg ingresó US $68 millones (Q508.6 millones), el año pasado, y lideró la lista de Forbes de los actores mejor pagados en 2017. Pero ahora encabeza el reparto de Mile 22, un largometraje en el que aparece acompañado por Lauren Cohan, John Malkovich, Iko Uwais y Ronda Rousey.
La nueva trama
Mile 22 se centra en un equipo de las fuerzas especiales que debe trasladar una valiosa fuente desde la embajada estadounidense en un país asiático hasta un aeropuerto, un plan que decenas de enemigos tratarán de frustrar. La cinta ofrece hora y media de pura acción y supone la cuarta colaboración de intérprete con el cineasta Peter Berg, tras Lone Survivor (2013), Deepwater Horizon y Patriots Day (ambas de 2016).
Productor, además de protagonista, Wahlberg dedicó palabras de elogio a Colombia, donde se rodó parte de la película: “Es increíble, todo. Animo a cualquiera que piense en trabajar en algún lado de Sudamérica que vaya a ese país a filmar”, apunta.
Un rol diferente
Serio, casi tímido, formal y muy correcto en las distancias cortas, el actor se alejó de sus turbulentos años jóvenes, en los que tuvo problemas con las drogas y la ley. Ahora vende una imagen pública de padre perfecto, capaz de levantarse a las 3:00 para ir a entrenar y que basa su vida en los ideales católicos. En este sentido, su rol de James Silva en Mile 22 no puede ser más diferente al artista, puesto que es un personaje impulsivo y siempre a tope de revoluciones.
Wahlberg indica que Silva iba a ser uno de los villanos, aunque finalmente se convirtió en la estrella del filme: “Pero aun así tenía esa clase de energía e intensidad y caminaba sobre la fina línea de buen tipo, mal tipo (…) Eso fue muy atractivo para mí”.
