El anfitrión quiere avanzar con honores.
A ciegas, sin saber quién puede ser el rival en octavos, Rusia y Uruguay compiten hoy en Samara por cerrar el Grupo A como líderes, por elegir entre Sochi y Moscú como inicio de un incierto camino en un mundial repleto de sorpresas, en el que cada vez es más complicado predecir cuál será la ruta hacia la final.
Cuatro horas antes de que España se juegue su futuro contra Marruecos, en Kaliningrado, y de que Portugal e Irán completen las clasificaciones del Grupo B; uruguayos y rusos, los rivales en octavos, cerrarán una de las pocas llaves del Mundial que ha respondido a lo esperado.
Los hombres del Maestro Óscar Washington Tabárez no quieren saber nada de su posible rival en octavos. Puede ser España, Portugal o incluso Irán, que aún tiene opciones de conseguir una de las dos plazas del Grupo C, pero el conjunto charrúa solo piensa en el encuentro frente a Rusia.
Como Uruguay, la Selección rusa medita que, puesto que no se conocerá el rival hasta horas después, el mejor camino es volver a ilusionar a la afición con otra victoria de prestigio. “No estamos en disposición de elegir oponente, así que queremos ser primeros”, indicó Cherchesov.
A Rusia le basta con el empate para ser primera de grupo, ya que tiene 8 goles en su haber y 1en contra, así que no tiene la obligación de atacar desde el primer minuto como contra los sauditas y egipcios.
*Samara-EFE