El ministro de Hacienda y Finanzas de Argentina, Nicolas Dujovne, reconoció ayer que quedan “2 o 3 meses difíciles” para la economía, como consecuencia del traspaso a los precios de la abrupta devaluación del peso, pero destacó que el país es de nuevo mercado emergente y va en “el camino correcto”.
“Tenemos que reconocer que pasamos por un momento difícil, no lo negamos; así como otros países lo han atravesado Argentina está integrada al mundo con sus beneficios y costos, pero pensamos que los beneficios superan a los costos”, remarcó el titular económico en una entrevista con radio La Red. Según recalcó, la abrupta depresión del peso -lo que llevó al Gobierno a pedir un préstamo al Fondo Monetario Internacional- va a tener consecuencia en los precios, por lo que todavía quedan “2 o 3 meses difíciles”.
Sin embargo, expresó: “cuando ocurren estas cosas” el Ejecutivo tiene “un esquema pensado para proteger a los ciudadanos” y volvió a apostar por un tipo de cambio flotante. EFE