El trabajo ha sido el factor de producción que ha sustentado el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del país en los últimos 67 años, de acuerdo con los estudios analíticos elaborados por el Banco de Guatemala (Banguat).
Ayer, al concluir la inauguración del XXVII Ciclo de Jornadas Económicas del Banguat, Sergio Recinos, presidente en funciones de esa entidad, declaró que la generación de empleo formal crece a una tasa de entre 3 y 4 por ciento anual, en promedio. Sin embargo, consideró que se debe potenciar este factor para acelerar la actividad económica.
Según cifras del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social, el número de afiliados a la seguridad social aumentó 6.6 % en 4 años, al pasar de 1 millón 227 mil 615 en el primer trimestre de 2014 a 1 millón 309 mil 785 a marzo de 2018.
Para Luis Linares, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales, el reto está en crear más empleo formal, porque hay 3 millones de asalariados en el país e ingresan 180 mil jóvenes cada año al mercado laboral.
Inversión
Por otro lado, Recinos expuso que las reformas estructurales implementadas entre 1960 y 1970 incrementaron la productividad durante esa época y marcaron la pauta que permitió acelerar el crecimiento económico por arriba del 5 %.
“En el caso del capital, su desempeño ha sido bastante modesto, con una tasa del 14 % en las últimas 5 décadas. Por eso es necesario elevar su participación como porcentaje del PIB, pues en países similares a Guatemala tiene tasas de inversión de aproximadamente el 22 % del PIB”, manifestó el funcionario. En ese contexto, Era Dabla-Noris, representante del Fondo Monetario Internacional y una de las panelistas del Ciclo de Jornadas Económicas, que concluye hoy, recomendó impulsar reformas destinadas a transformar la estructura productiva y mejorar la asignación de recursos para adoptar nuevas tecnologías.Recinos resaltó la importancia de invertir en la educación.
Previsión
El Banco de Guatemala (Banguat) prevé que la estimación de crecimiento económico para este año, situada en el rango de entre 3 y 3.8 %, no se verá afectada por los daños y pérdidas que ocasionó el domingo 3 de junio la erupción del volcán de Fuego.
“Cuando se analiza el impacto se hace una separación entre los daños a la infraestructura y las pérdidas, las cuales están relacionadas con una baja en la producción de los cultivos. Pero estimamos que estos factores se van a compensar con la inversión que se hará en la reconstrucción”, expresó Sergio Recinos, presidente en funciones del Banguat.